Javier Hermoso de Mendoza
Javier Hermoso de Mendoza
INICIO - ARTICULOS - APELLIDO - ESTELLA.info - GALERIA DE ARTE - ENLACES - CONTACTO

COMPRAREMOS TODO EN VIANA

La posible creación de un gran polígono comercial en Viana es otro problema que debemos sumar a los que ya arrastra la merindad. Tal como lo recogió DDN el pasado 17 de octubre, un dictamen de la Cámara de Comercio de Navarra señala que el polígono supera el "límite máximo autorizable (...), rebasa los límites máximos recomendados por el modelo territorial de grandes establecimientos de la Comunidad Foral" y planteará una competencia importante a Estella y San Adrián. Como es natural, también tendrá sus beneficiarios: el ayuntamiento de Viana, que incrementará sus ingresos; el grupo Murias, que hará el agosto; y la Hacienda Foral, cuyas alegrías se disiparán cuando cierre el comercio que no pueda hacer frente a esa feroz competencia y los comerciantes y sus empleados engrosen las listas del paro.

No soy capaz de valorar las ventajas que para mí, como consumidor, puede representar ese macro polígono. Pero me preocupa su incidencia sobre el comercio de la merindad: no me gustaría que desaparecieran las pocas salidas laborales que la mujer tiene en Estella; no me agradaría que los locales de nuestras calles ofrezcan la imagen de los antiguos Calzados Yordi, por ejemplo.

El riesgo no es retórico: el área comercial de Estella ha venido reduciéndose en límites y población, si bien esa reducción ha sido compensada por la movilidad del consumidor y su mayor nivel de vida. Pero su fidelidad, atraída por la oferta novedosa y por la mejora de las comunicaciones, puede desaparecer. Hace treinta años, los sábados, nuestros bares y salas de fiesta se llenaban de jóvenes llegados de la merindad y de Pamplona; hoy, apenas vienen, y el joven estellés que puede se desplaza a Pamplona, Logroño, etc., quedando Estella casi vacía. Es un ejemplo de cómo, en poco tiempo, podemos pasar de ser un oasis a ser un desierto.

¿Es posible anular ese riesgo? Pues sí: con profesionalidad, aparcamientos, exigiendo el respeto a esos límites de que habla el dictamen de la Cámara, presentando alegaciones -si aún se está a tiempo-, y presionando al Gobierno para que antes de autorizar el polígono espere a que se elabore la Ley General de Comercio que se está elaborando. Labor que corresponde a comerciantes, parlamentarios, y ayuntamientos afectados.

Ya va siendo hora de que nos demos cuenta de que Tierra Estella pinta muy poco para el Gobierno y el Parlamento. Y pinta poco, fundamentalmente, porque no somos capaces de defender nuestros derechos, y porque tenemos unos políticos preocupados por intereses ajenos a los de la merindad. Veamos dos ejemplos: las presiones del ayuntamiento de Pamplona han conseguido abortar la instalación de Corte Inglés en Barañain, y ante el proyecto de hacer sendas áreas comerciales en Ripagaina y Sarriguren el Parlamento ha aprobado una moratoria hasta en tanto no se apruebe la Ley General de Comercio.

¿No debería afectar esa moratoria a todo el territorio foral? ¿O es que nuestra merindad no forma parte de él? Es posible que junto a nuestra irrelevancia política, en la decisión de autorizarlo influya la previsión de que absorberá importantes recursos de La Rioja y Álava, y que si no lo permitimos en Viana podrá instalarse en cualquiera de las provincias limítrofes. Pero dada su trascendencia, no será difícil llegar a un acuerdo entre las tres y establecer límites para que esos polígonos no destruyan el comercio tradicional en un radio de cuarenta kilómetros.

Otra sería la preocupación y el interés del Gobierno y de nuestros políticos si en Tarazona se proyectara un complejo comercial que pusiera en peligro el comercio de Tudela y su ribera. Pero claro, Tudela y su ribera cuenta, y, además, sabe defender sus intereses.

Nota: Esta colaboración se publicó en la edición Tierra Estella de Diario de Navarra, el 16/11/00

Nadie se movió, y hoy el Centro Comercial Las Cañas de Viana se está construyendo a toda pastilla. Dentro de pocos años podremos valorar su repercusión sobre el comercio de la merindad.

ARRIBA © 2003-2005 Javier Hermoso de Mendoza